Conocí a una mujer, ella era espectacular, impactante, ella tenia algo en sus ojos que no logré descifrar, era alta, con un cuerpo increíble, sus palabras todas eran como sacadas de uno de mis sueños... deslumbrante!
Pensé, esta mujer es con la que realmente quiero estar, no hay otra, es ella, qué mujer única... pasamos la noche juntos, bebimos mucho vino y encendimos las velas, entramos en un calor indescriptible, fue como nuestros cuerpos en pocas horas encontraron las posturas perfectas para pasar el resto de las horas hasta el amanecer.
Cuando salió el sol, ella se vistió, fue por desayuno de una sola volada y preparó una mañana increíble para los dos. Todo me parecía demasiado para mi solo... pero aproveché y disfruté todo lo que nos pasó.
A las semanas se perdió del planeta, pasaron días y días en los que mi mente no podía alejarse de su recuerdo... pero hoy, ya no sé si sólo fue un sueño... y me asusta haber soñado de una forma tan tangible y no haberlo podido hacer realidad.
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